La celebración del Día del Docente 2017 reunió en el Parlamento de Cantabria a buena parte de los 257 profesores jubilados el último curso en esta región, objeto central del homenaje que un año más la Consejería de Educación, Cultura y Deporte ha querido brindarles.
El homenaje se ha hecho extensivo a los 9000 profesores que trabajan en la enseñanza pública y concertada de Cantabria, y ha estado presidido por la presidenta del Parlamento de Cantabria, Dolores Gorostiaga; la vicepresidenta del Gobierno, Eva Díaz Tezanos, y el consejero de Educación, Ramón Ruiz.
Ramón Ruiz señaló durante el acto que se sentía “orgulloso de los docentes que tiene la región” y requirió a la ciudadanía para que se interese por conocer mejor el trabajo que realizan día a día. El consejero pidió también a los ciudadanos “respeto por una profesión que ayuda a los ciudadanos a mejorar intelectual y moralmente, que ayuda a mejorar la vida de los demás, que ayuda a mejorar Cantabria”. Y añadió que, a pesar de los cambios curriculares, pedagógicos y organizativos, “hay algo que no ha cambiado: vuestra vocación y amor por la profesión docente”.
El consejero de Educación, Cultura y Deporte, que estuvo acompañado por su equipo directivo, recordó que “la función docente trabaja día a día en el aula los valores de la convivencia y el diálogo”, y agradeció a la vicepresidenta Eva Díaz Tezanos el haber recuperado institucionalmente la celebración del Día del Docente y su contribución a las altas cotas de calidad y equidad de nuestro sistema educativo, que es “un buen sistema educativo”. Al conferenciante invitado, Ángel Gabilondo, le pidió que siguiera trabajando “por un pacto básico, social y político por la educación”.
La presidenta del Parlamento, Dolores Gorostiaga, dio la bienvenida, agradeciendo a los docentes el “enseñar a nuestros hijos los distintos caminos de la vida”.
Como ponente invitado intervino el señalado Ángel Gabilondo, exministro de Educación y catedrático de Metafísica en la Universidad Autónoma de Madrid, que dijo que “Cantabria será lo que sea su educación”, para añadir que “la miseria y la ignorancia solo se combate con la cultura y la educación”. Gabilondo se mostró convencido de la necesidad de un pacto escolar: “Pongamos estabilidad en la normativa, en los objetivos y en los recursos”. A continuación, pidió un compromiso con el futuro del país, anteponiendo el bien colectivo. Respecto a la naturaleza del trabajo docente, el conferenciante desgranó las características del buen profesor: curiosidad, generosidad…, pero sobre todo ser buena gente: “No se puede ser buen maestro si no se es buena persona”, dijo recordando a Marco Aurelio. Gabilondo añadió que “la educación no se reduce al horario escolar; todo es educativo, el entorno, el ocio, los hogares…”. Además, puso especial énfasis en señalar que “lo importante en el aula es enseñar a hablar, a leer y a escribir”, para concluir que “educar es una de las tareas más complejas de la vida, pero también la que despierta mayor ilusión”.
La Orquesta Barroca del Conservatorio Jesús de Monasterio de Santander y el músico Marcos Bárcena pusieron el contrapunto musical al acto, en el cual se proyectó un video realizado por el CRIEME de Polanco con testimonios de docentes jubilados y se reconoció con una placa conmemorativa la importante labor educativa que han desempeñado cuatro institutos de Cantabria que celebran su centenario (el IES Santa Clara) o sus cincuenta años de vida (los Institutos José María Pereda, Ataúlfo Argenta y José del Campo).
Los docentes jubilados reibieron, por su parte, un grabado realizado por un alumno de la Escuela de Arte Nº 1 de Puente San Miguel y los libros Vidas Maestras 2016 y La educación primaria en Cantabria 1923-1936. Dictadura de Primo de Rivera y Segunda República, de Ángel Llano Díaz.